Adaptación a cambios.
En ocasiones puede haber eventos en la vida de las personas que generan un cambio importante en sus circunstancias vitales, estos pueden ser eventos mayores como un divorcio, pero también hay circunstancias menores que pueden tener un impacto en nuestra salud mental y nuestro desempeño como un cambio de trabajo, el nacimiento de un hijo, cambios de ciudad etc. Esto puede generar altos niveles de estrés, aparición de emociones desagradables como ansiedad, depresión o irritabilidad y en ocasiones cambios en nuestra forma de actuar.
El tratamiento para este tipo de crisis vitales y dificultad para adaptarse a ellas está basado en el acompañamiento emocional, el dotar a la persona de herramientas para hacer frente a los cambios y las consecuencias que estos pueden tener, entrenar en técnicas de afrontamiento y de inoculación al estrés. El objetivo final de la intervención terapéutica es la de ayudar a la persona a volver a sus hábitos normales, recuperar la sensación de control y mejorar su capacidad para adaptarse y superar la crisis.
Duelo.
La pérdida de un ser querido es un evento muy doloroso que da lugar a un proceso de duelo que normalmente ocasiona un desequilibrio emocional. Este proceso va acompañado de emociones dolorosas y un trabajo mental para acostumbrarse a vivir con la ausencia de esa persona. Los sentimientos más comunes en las personas que pasan por un duelo son la tristeza, ira, ansiedad, soledad, culpa, aislamiento y pueden estar acompañados por cansancio, desmotivación, problemas de sueño, cambios en el apetito entre otros.
En la terapia de duelo se busca acompañar a la persona en el proceso de duelo y adaptación a este cambio tan importante, se enseña a lidiar con el dolor emocional que conlleva la pérdida y a desarrollar estrategias para poder volver a un equilibrio emocional.
Ruptura sentimental.
El terminar una relación de pareja puede provocar alteraciones en el equilibrio emocional de las personas. Cuando hay una separación, las personas entran en un proceso de duelo que suele estar acompañado de emociones como tristeza, ansiedad, melancolía, nostalgia, ira, frustración etc. También es posible que la persona se sienta perdida ya que tiene que reorganizar las expectativas de futuro que tenía con su pareja.
Cuando se trata a un paciente que está pasando por una ruptura sentimental, el tratamiento se basa en el acompañamiento emocional, la normalización y aceptación de las emociones que siente y de enseñarle cómo funciona el proceso de duelo. También nos centramos en las estrategias de afrontamiento de las personas para que pueda cubrir sus necesidades tanto afectivas como de acompañamiento y en poder hacer sentido de lo que sucedió y porqué; así como una nueva visión de futuro y adaptación a su nueva situación sentimental.
Embarazos.
El embarazo normalmente se ve como una etapa de felicidad para las madres o las familias, y aunque esto es verdad, la realidad es que un cambio tan grande como es la maternidad puede venir acompañado de muchas emociones negativas como estrés, ansiedad, preocupación, tristeza, etc.
En psicoterapia se busca ayudar a las madres o familias que están pasando por un embarazo a poder gestionar mejor las emociones negativas que se experimentan, en la terapia cognitivo conductual se busca mejorar las habilidades de afrontamiento, hacer frente a los miedos y preocupaciones sobre el bebé o el impacto que puede tener este cambio en la vida de la madre. Con esto se busca que la persona disminuya el impacto negativo tanto a nivel psicológico como físico de estas emociones y que pueda experimentar esta etapa con mayor tranquilidad y felicidad.
Jubilación.
La jubilación normalmente se ve como un capítulo nuevo en la vida de las personas en el que ya pueden descansar y disfrutar, sin embargo, para algunos éste nuevo capítulo puede venir acompañado de una pérdida de sentido o una sensación de vacío al perder el rol y las actividades que desempeñó durante mucho tiempo. Las personas que se enfrentan a una jubilación pueden llegar a experimentar sensación de desesperanza, sentirse perdidos o inútiles, aburridos, esto puede desencadenar problemas con la pareja, familia o una disminución de autoestima.
Al tratar a una persona que está jubilada o que está planeando jubilarse el enfoque cognitivo conductual se basa en ayudar a la persona a buscar un nuevo significado a su vida, es importante que no se pierda la motivación para realizar actividades y relacionarse con otras personas. El tratamiento también busca que la persona jubilada mantenga la sensación de autoeficacia y utilidad que le dotaba el trabajo. Esto se trabaja a través de técnicas cognitivo conductuales que buscan cambiar las distorsiones cognitivas que pueden producir este tipo de cambios y de llevar a cabo acciones para poder sentirse plenos y satisfechos otra vez.
Independencia de los hijos. (Nido vacío)
El nido vacío es una sensación de soledad que experimentan los padres o tutores cuando sus hijos se van de casa, esta sensación puede estar acompañada de emociones desagradables como la tristeza y ansiedad, también se puede experimentar una sensación de vacío o de sentirse perdidos al dejar de desempeñar el rol de cuidadores al que estaban acostumbrados. En estos casos también se pueden presentar crisis de pareja ya que los padres se encuentran ante un nuevo escenario de convivencia al que tienen que adaptarse los dos.
La terapia se enfoca en ayudar a las personas a adaptarse a esta nueva situación vital, a desarrollar estrategias para poder retomar control de su vida y generar actividades que mejoren su autoestima y la autopercepción. El enfoque cognitivo conductual se enfoca en ayudar a gestionar las emociones que resultan de este cambio y a modificar cogniciones que pueden ayudar al mantenimiento de la sintomatología.